"Alimenta tu fe y tus dudas morirán de hambre"

viernes, 11 de junio de 2010

En una sala de urgencias.

Jóven, 23 años.
Embarazada de sueños.
Con sangrado interno debido a una herida abrasiva, limpia,
y de unos 10 cms a la altura del corazón.
Ha dejado de latir en la ambulancia.
Hemos practicado reanimación cardiopulmonar pero no remonta.

¡¡¡¡¡ RÁPIDO AL BOX 3 !!!!

¿Que ocurre esta vez doctora?
De nuevo nos traen un corazón roto, y este hospital ya no tiene vendas suficientes con que intentar repararlos, ni anestesias para embriagarlos. Llegan moribundos, abatidos y sin ganas de seguir latiendo. No tenemos tan buenos profesionales como para que todos quieran seguir adelante.

Siempre es igual, vienen cuando han perdido la esperanza en el sexo opuesto e incluso en el propio. Han sufrido por amor, han llorado de rabia, han perdido amistades por el camino. Se han hecho malas suturas a ellos mismos y ahora no hay personal sanitario que lo arregle.

¿Cómo les devolvemos la espranza?
¿Cómo arrancamos esos recuerdos que les desgarran el miocardio?
¿Cómo eliminas el virus del "amor romántico"?

No, de momento, no hay solución. Sólo un triste vendaje, en dónde sólo el corazón más fuerte vuelva a reponerse.

4 comentarios:

  1. urgencias amorosas?
    mmm...deberías escribirle una cara a Don Zapa para que dedicara una sola planta en todos los hospitales a ellas!:)
    pd: la confianza de la que hablas en poetadebotella la necesitamos todos, sigue buscando esto es como los rasca y gana!

    muá niña bajita!

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  2. Original es poco, me gusta mucho :)

    Un fuerte abrazo!

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  3. La duda ofende! jajaja
    me vooy pasando por aqui, un beso!

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